Vistas de página en total

miércoles, 17 de agosto de 2016

Miedo.

Esta noche hace frío, a veces me sorprendo de lo rápido que cambia la temperatura en esta ciudad... Tan rápido tengo calor como frío. Tan rápido estoy a gusto como no tengo ganas de nada. Tengo miedo y frío en mi cama. Sé que no muy lejos me espera lo que mas temo. Así me duermo, con el corazón en un puño, con las lágrimas en los ojos.
No es normal. No es algo lógico que te tenga miedo, tendría que quererte, no que tenerte miedo acostada en mi cuarto mientras duermes. No es normal que hables y, cada palabra, sea una cuchilla que me atraviesa y crispa cada célula de mi cuerpo. Cada parte de mí. Debería estar contigo haciendo cualquier cosa y estar a gusto. Sentirme protegida. No todo lo contrario.
No es natural que tú puedas alzar la voz y silenciarme mientras yo no puedo llorar sin saber que tendrá consecuencias. No es natural ni lógico ni es amor ni es nada. Es basura disfrazada, perfumada y decorada con putos corazones rosas. No te quiero cerca, no porque no te quiera yo, sino porque TÚ solito has hecho que no te quiera. TÚ solito has forjado en mí estos sentimientos que odio.
Más me gustaría a mí ser capaz de quererte.
Porque significaría que te lo mereces. Significaría que te has ganado a pulso cada mota de cariño. Pero no lo has hecho. No te has molestado en hacerlo, tampoco. Solo te has molestado en hundirme mil veces en mi propio cuerpo, solo te has molestado en convertirme en un animalillo débil y sumiso.
Pero lo siento, ni tú ni nadie podréis volver a someterme. Ni tú ni nadie volvereis a hacerme sentir así, nunca más.
Conocerte ha tenido algo bueno: No volveré a acercarme a alguien como tú, nunca más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario