Vistas de página en total

lunes, 2 de octubre de 2017

Raquel.

No puedo dormir, otra noche en vela soñandote despierta. Sí, a ti, pequeña Cenicienta de cabellos marrones y ojos color tigre. Sí, te sueño despierta mientras pienso en lo que es rozar mis labios con los tuyos, lo que es tenerte entre mis brazos, lo que es oír tu voz en mi oído. Te sueño y pienso en todo lo que me queda contigo. Porque aún queda mucho viaje, aún queda mucho por delante, quizá esto no vea la luz en unos cuantos días, porque no quiero apresurarme. Porque tus sonrojadas mejillas, me emocionan y me avivan. No quiero apresurarme porque me da miedo vivir la vida, porque ésta me ha dado la oportunidad de tenerte y no quiero desaprovechar con carreras absurdas, voy a tomarme el tiempo necesario de descubrir tus piezas y encajarlas. Voy a tomarme el tiempo necesario de descubrir tus inquetudes y tus pasiones. Voy a tomarme el tiempo necesario de desnudarte cuando sea preciso y ayudarte a vestirte cuando así me lo pidas. Voy a tomarme el tiempo necesario de que sean tus labios los que me cuenten que me han encontrado. Voy a soñarte despierta cada rato, como hago con la vida que he planeado junto a él y ya he hecho cierta. Voy a comerte a besos cada verso que salga de tu boca y voy a recitarte en mi piel lo que me toca. Voy a rozar con mis dedos tu espalda, y voy a cubrirte de besos, de poemas y de palabras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario